viernes, 14 de noviembre de 2008
Nanotecnología y los dispositivos de comunicación del futuro..
martes, 11 de noviembre de 2008
Mi trabajo
DETERMINACION DE MORTALIDAD CAUSADA POR UN GRUPO DE CEPAS BACTERIANAS MEDIANTE UN BIOENSAYO CON PENAEUS VANNAMEI
Resumen
Dentro de los cultivos de interés comercial para la acuicultura, muchas veces nos encontramos con eventos de mortalidad sin razón aparente o por lo menos sin una idea concisa de las causas. Podemos citar un evento de mortalidad ocurrido en una camaronera ubicada en la costa de Ecuador. El presente estudio se realizo como método de comprobación de una posible causa de mortalidad asociada a bacterias halladas en el medio de los animales debido al irregular aumento en su población. Se tomaron muestras de las cepas más abundantes, de las cuales 5 fueron las seleccionadas, las cuales fueron probadas en infecciones experimentales controladas realizadas dentro de las instalaciones de la ESPOL (Escuela Superior Politécnica del Litoral) Guayaquil - Ecuador, para las cuales se inyectaron concentraciones conocidas de las bacterias en camarones Penaeus vannamei individualizados de 2 g de peso, se utilizo un control y 5 grupos de prueba de las cuales dos de aquellas cepas presentaron mortalidad superior al 80% al cabo de 72 horas, siendo las únicas que causaron mortalidad significativa, estas fueron identificadas como V. anguillarum y V. vulnificus respectivamente. Debido a estos resultados, podemos concluir que uno de los motivos más probables de la mortalidad encontrada en la camaronera, se debió por la acción de estas dos cepas.
lunes, 10 de noviembre de 2008
Trichoplax adhaerens no es tan antiguo como se creia..

Una misteriosa forma de vida que parece más una mancha que un animal, ahora ha pasado a engrosar una lista en la que figuran otras criaturas primitivas y enigmáticas cuyos genomas están ayudando a averiguar cómo surgieron los animales hace más de 650 millones de años.
Debido a su aspecto tan simple, se supuso que el Trichoplax representaba una forma primaria de vida animal. Otros expertos pensaron que sólo era un miembro simplificado del filo Cnidaria, al que pertenecen las medusas y las hidras.
Mansi Srivastava, de la Universidad de California en Berkeley, y sus colaboradores quisieron averiguar dónde encajaría con otros animales, en particular los cnidarios, las esponjas y otros animales más complejos.
De minúsculo tamaño, el Trichoplax presenta un aspecto parecido al de una ameba multicelular. No parece tener nervios, ni células sensoriales o musculares. Nunca se le ha observado reproduciéndose sexualmente; normalmente sólo se divide en dos unidades indefinidas.
Aunque el Trichoplax no está en la base del árbol genealógico animal, el comparar su genoma con otros puede decirnos qué conjunto básico de "herramientas" moleculares estaba presente en el antepasado común de todos los animales.
El Trichoplax es la única especie de placozoo que ha recibido un nombre.
Los placozoos se descubrieron en la década de 1880, pero fueron olvidados rápidamente hasta la década de 1970, cuando el biólogo alemán Karl Grell, ya fallecido, descubrió cómo mantenerlos vivos y estudió por primera vez su biología. La cepa de Trichoplax secuenciada es una descendiente directa de la colección de Grell proporcionada por un sucesor suyo y coautor del estudio, Bernd Schierwater, director del Instituto de Ecología Animal y Biología Celular, y director del Centro para la Biodiversidad en la Universidad de Medicina Veterinaria en Hannover, Alemania.
